“El país sigue reclamando diálogo, entendimiento y sensatez, no un diálogo que sea solo un mecanismo para apaciguar la protesta sino verdadero, con una agenda visible que conduzca a resultados tangibles”, dijo el presidente de la CEV, Diego Padrón, al ofrecer el discurso inaugural de la 102 Asamblea de los obispos católicos.
Padrón, arzobispo de Cumaná (oriente), dijo que con el diálogo que se inició el 10 de abril pasado entre el Gobierno y la oposición “se esperaba encontrar caminos comunes para la superación de la conflictividad e ingobernabilidad” pero resultó que “no fue más que una simple contingencia sin proyección ni consecuencias”. “Se congeló sin resultados”, agregó el prelado.
El proceso de diálogo se activó con el fin de aliviar la crisis política en Venezuela que se agudizó con las protestas antigubernamentales que se iniciaron en febrero pasado y que se desarrollaron durante casi cuatro meses con algunos eventos violentos que dejaron 43 muertos, cientos de heridos y detenidos.
Las conversaciones se “congelaron” el pasado 13 de mayo por decisión de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).